Un poeta nacido
en este primer siglo
después del veinte
es un oxímoron tan vital
y tan inexplicable
como poco frecuente
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Un pájaro vivía en mí.
Una flor viajaba en mi sangre.
Mi corazón era un violín.
Quise o no quise. Pero a veces
me quisieron. También a mí
me alegraban: la primavera,
las manos juntas, lo feliz.
¡Digo que el hombre debe serlo!
(Aquí yace un pájaro.
estoy conmovida cmo te brotan los pensamientos cada vez que leo me ciento mas idiota buenicimo esto es que no se mucho si se que sos mi ñieto besosssss
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